Hay artistas que enamoran. Y no, no hablo de adolescentes cursis con temas melosos, hablo de esa clase de cantantes con los que te irías a tomar unas cañas sabiendo que tienes una tarde de risas aseguradas. Lily Allen es sin duda una de estas artistas, y es que en un momento en el que la industria musical está más gobernada por tetas y culos que nunca (véanse Miley, Gaga, Perry... La lista es larga) la buena de Allen ha decidido que su regreso triunfal tras cuatro años de parón fuera una auténtica caricatura de toda esta industria y del papel femenino en ella. Un vídeo desternillante y una letra que vale oro son el resultado.
Aunque este vídeo pueda parecer escandaloso, Lily Allen no es para nada nueva en lo de criticar. Desde el ansia de fama en The Fear hasta la ineficacia de sus novios en la cama en Not Fair, Lily se mete con todo lo que puede. Es como una de esas solteronas ácidas que todos adoramos, pero dentro del cuerpo de una chica de veintiocho añitos. Sin duda se ha especializado en ello y difícilmente alguien podría hacerlo mejor.
Con Hard Out Here Lily regresa al mundo de la música que abandonó en 2009 tras el brillante disco It's Not Me, It's You, y ya está dando qué hablar. Este tema presenta el que será su tercer álbum de estudio y ha creado muchas expectativas, porque Hard Out Here es brillante. Desde los movimientos de twerking pasando por la liposucción y el Autotune del estribillo, no hay un sólo elemento puesto por casualidad. Una tercera estrofa perfecta con el mayor número de "bitch" por segundo que nunca hayamos oído para ilustrar la creciente sobreexplotación de los tacos en las canciones para llamar la atención y joyitas como "Olvida tus pelotas y desarrolla un par de tetas" o "Deberías adelgazar, no podemos verte los huesos" encajan perfectamente en el elaborado tejido de sarcasmo y humor que Allen hila con maestría.
Nada más que decir. Además de todo esto es un temazo, pegadizo como el engrudo y que sin duda te asegura un buen rato al escucharlo.
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